Paraíso natural con sabor español: Tenerife

En ocasiones, buscamos las maravillas muy lejos, cuando las tenemos al alcance de la mano. Tal vez os ha ocurrido a ti y a tu pareja, después de tanto tiempo, el caer en una especie de monotonía. Sin embargo, levantaros una mañana y descubrir que aquella persona de la que te enamoraste hace ya tanto tiempo, sigue siendo lo más importante del mundo para ti… ¡Eso merece una celebración!

Y qué mejor que hacerlo en uno de esos parajes que, a veces, por estar cerca, pasan desapercibidos: las Islas Canarias. Un paraíso muy cerca de la península, con la misma moneda y el mismo lenguaje. Sin tener nada que envidiar a esos grandes destinos de allende los mares.

Imagina estar en una habitación fastuosa, con todas las comodidades, y asomarte por la ventana para ver el mar desde una posición privilegiada: un acantilado frente a la Isla de la Gomera. Tenerife, es lo que tiene. Acantilados, el parque natural de El Teide para hacer una buena ruta en la naturaleza, o bien ver la cantidad de pueblos que existen y que te impresionarán, sobre todo si los disfrutas con unas buenas “papas arrugás” con mojo picón o verde.

Si os animáis, el Hotel Bahía Príncipe Tenerife, podría ser una buena opción.  La playa exclusiva a la que tendrás acceso es una cala preciosa con un suelo de suave piedra que os evitará la molestia de la arena, a la vez que os acunará con el relajante ruido del mar entre los guijarros. Tal vez sois de los que preferís el agua dulce: con las piscinas tipo “infinity pool”, rodeadas por solárium y jardines, no sabréis si estáis dándoos un baño o en el paraíso.

Supongo que también querréis cuidar la gastronomía. Ya se sabe, al corazón se llega por el estómago. Pues no dejéis de probar la cuidada cocina canaria que tienen, así como los restaurantes temáticos de cocina mexicana y asiática. Y la selección de cócteles y bebidas, no dejarán de sorprenderos.

¿A qué esperáis para que las Islas Canarias os conquisten cuanto antes?

Foto | Pierre Verhoeven